En el día del Médico Veterinario, destacadas académicas de Favet nos hablan de la importancia de la regulación del uso de antibióticos para la salud pública y los avances de la Universidad de Chile en esta materia.
El uso inadecuado y excesivo de los antibióticos, como herramienta contra enfermedades infecciosas en humanos y animales, es la principal causa del aumento de la resistencia bacteriana a estos medicamentos, conocida como RAM. Bacterias, microorganismos se hacen cada vez más difíciles de controlar con estos tratamientos, lo que significa un riesgo para el bienestar animal y humano a la vez.
“Para los sistemas de producción animal, el aumento de la resistencia bacteriana también amenaza la sanidad y bienestar de los animales ya que, frente a la pérdida de eficacia de los antibióticos, una mayor cantidad de animales se enferman aumentando también la mortalidad frente a estas enfermedades infecciosas difíciles de tratar. De esta manera, el impacto de la resistencia bacteriana sobre la salud y bienestar de los animales de producción, se traduce también en una menor disponibilidad de alimentos de origen animal para la población humana”, explicó la Dra. Betty San Martín, académica de Favet y directora del Laboratorio de Farmacología y Veterinaria FARMAVET.
La resistencia bacteriana se presenta en la actualidad como un problema transversal que debe ser tratado en un trabajo articulado bajo el concepto de “Una Salud”, iniciativa interdisciplinaria que abarca la salud humana, animal y medio ambiental. De acuerdo con la Dra. San Martín, la Organización Mundial de la Salud (OMS), junto a otros organismos intergubernamentales como la Organización Mundial de Sanidad Animal (OIE), solicitan a los países adoptar medidas bajo este enfoque multisectorial en el tema.
La Dra. Lisette Lapierre, académica y subdirectora del Departamento de Medicina Preventiva Animal de Favet, refuerza que la RAM es un tema de salud pública señalando que “los antibióticos que se usan para tratar las enfermedades en animales son los mismos que los que se usan en humanos, además existen bacterias patógenas que son zoonóticas, es decir, que se transmiten entre animales y humanos y viceversa. Los alimentos podrían contaminarse con estas bacterias resistentes o con genes de resistencia provenientes de los animales y entonces, vía alimentaria traspasarse al hombre y producir una enfermedad que sería más compleja de tratar debido a la condición de resistencia. Además, podría haber un brote en humanos con esta bacteria resistente, ya que los alimentos pueden llegar a diferentes lugares, y regiones y países”.
En este sentido, la Medicina Veterinaria juega un papel fundamental para la salud, controlando el uso adecuado de los antibióticos en los animales, sobre todo en aquellos que son producidos para el consumo humano.
“Debemos educar a la comunidad en el uso adecuado de antibióticos, que los productores y los dueños de los animales entiendan la importancia de conservar la eficacia de los antibióticos. Los médicos veterinarios somos indispensables en este tema como prescriptores y como educadores. Nosotros velamos por la inocuidad alimentaria y salud animal, participamos en la salud pública y medioambiental, estamos inmersos en todos los ámbitos de acción y nuestra visión es fundamental para ayudar en el tema de la RAM”, destacó la Dra. Lapierre, quien también forma parte de la directiva de la Comisión “Una Salud” del Colegio Médico Veterinario (Colmevet).
De acuerdo con la Dra. Lapierre la problemática de la RAM es más grave de lo que se podría pensar, la principal amenaza radica en que “existen bacterias multirresistentes en las que no hay alternativas terapéuticas y los pacientes fallecen debido a estas infecciones que no tienen cura”. Aquí el escenario se vuelve complejo porque la resistencia a los antibióticos de las bacterias tiene múltiples causas y orígenes. “Existen bacterias que son prioritarias y que están definidas por la Organización Mundial de la Salud, estas son Enterobacterias resistentes a carbapenémicos y Salmonella y Campylobacter resistentes a fluoroquinolonas”, especificó la Dra. Lapierre.
Referente internacional para el control del uso de antibióticos en la producción animal
El Laboratorio FARMAVET destaca por su alto rigor científico y tecnológico, y está acreditado bajo Normas Internacionales ISO con el fin dar confiabilidad a sus resultados. Certifica la inocuidad de los alimentos de origen animal que se producen a nivel nacional, lo que, según palabras de la Dra. San Martín, “es un requisito ineludible que deben cumplir la industria pecuaria y acuícola que exportan a diferentes países como son Estados Unidos de América, Unión Europea, China, Japón, Rusia y otros”.
“Favet ha generado importantes alianzas con instituciones públicas y privadas para el desarrollo de diversas iniciativas, desde proyectos básicos hasta comunicación de riesgo, pasando por estudios epidemiológicos con el Servicio Nacional de Pesca (Sernapesca), el Instituto de Salud Pública (ISP), la Agencia Chilena para la Inocuidad Alimentaria (Achipia), el Ministerio de Salud (Minsal) y Colmevet. A su vez, la industria de alimentos siempre ha mantenido mucho interés en usar adecuadamente los antibióticos y preservar su eficacia”, recalcó la Dra. Javiera Cornejo, directora del Laboratorio de Inocuidad de los Alimentos.
Una de las áreas de producción a nivel nacional, que significa una importante actividad económica de exportación, es la acuicultura. FARMAVET, además de ser denominado Laboratorio de Referencia Nacional en el ámbito de la farmacología en la industria del salmón, es responsable de las certificaciones que realizan diferentes organismos del estado como el Servicio Agrícola Ganadero (SAG), Minsal y Sernapesca, en los alimentos que se exportan y se consumen a nivel nacional.
“En estos cinco últimos años, nuestras principales líneas de investigación financiadas por el Fondo de Investigación Estratégica (FIE) para apoyar la Gestión Sanitaria en Acuicultura, han estado orientadas a establecer las bases para el buen uso de los antibióticos en los centros de cultivo de salmones. Con este fin hemos realizado estudios que han permitido optimizar los esquemas terapéuticos de los principales antibióticos utilizados en la industria del salmón, analizando diferentes parámetros farmacológicos, realizando estudios de sensibilidad bacteriana y evaluando su eficacia y respuesta clínica. Además, hemos realizado estudios de depleción en peces tratados, con el fin de asegurar la entrega de un alimento libre de residuos de medicamentos al consumidor”, aseguró la Dra. San Martín.
Favet se configura como un referente internacional en la materia al contar con profesionales de alto nivel académico y científico; a su vez, es pionera en la investigación y abordaje de este problema, promoviendo el uso adecuado de antibióticos a nivel nacional. De hecho, en el mes de septiembre, el Laboratorio FARMAVET se constituyó como punto focal de un importante acuerdo de cooperación técnico-científica con Sernapesca y el Centro Estatal Ruso para el control de medicamentos y químicos en los productos acuícolas de exportación.
Avances y promoción del uso responsable de antibióticos
La Dra. San Martín sostiene que fue en el año 2000 cuando la Facultad realizó los primeros estudios de fármaco-vigilancia de la resistencia bacteriana en el ganado lechero, y posteriormente se hicieron los primeros estudios de monitoreo de la resistencia en bacterias zoonóticas y comensales aisladas de aves cerdos y bovinos; resultados muy significativos en la materia que se convirtieron en publicaciones en destacadas revistas nacionales e internacionales, y difundidos en seminarios y conferencias a Médicos Veterinarios que se desempeñaban en diferentes áreas de producción animal.
Por su parte, la Dra. Lapierre añadió que en Favet “existen varios investigadores que posteriormente hemos desarrollado diversos proyectos que pretenden desde conocer la prevalencia, los genes de resistencia presentes en animales y en medioambiente, hasta la generación de controles como guías de uso. Comenzamos a realizar cursos de actualización de uso adecuado de antibióticos, clases de pre y posgrado de concientización, seminarios gratuitos como los de One Health en el tema, diversos proyectos de investigación y asesorías a instituciones gubernamentales y privadas”.
En Colmevet, Favet tiene una importante participación de académicos en la Mesa RAM de pequeños animales, así como también en la directiva de la Comisión “Una Salud”, que se encarga de la difusión de importantes temas de salud pública como la RAM, y donde, además de la Dra. Lapierre, participan como director el Dr. Nicolás Galarce, Jefe del Laboratorio de Diagnóstico de Agentes Infecciosos de la Facultad, y como subdirectora, la Dra. Cornejo, quien, además, es Directora de Extensión y Vinculación con el Medio, de la misma unidad académica.
“En la Facultad estamos en la etapa de investigación epidemiológica para poder en base a este conocimiento previo, ofrecer soluciones y plantear proyectos que pretendan detener la emergencia de la resistencia”, planteó la Dra. Lapierre.
“El año 2019 Favet adquirió un equipo de última generación Vitex2 que permite la identificación de bacterias patógenas y además evaluar su sensibilidad a los antibióticos en forma automatizada, disminuyendo los errores propios de las técnicas manuales. Somos el único laboratorio público de medicina veterinaria que cuenta con este equipamiento”, complementó el Dr. Galarce.
La OMS, así como la OIE, la Organización de Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) y el Codex Alimentarius, recomiendan el desarrollo e implementación de políticas públicas que apoyen el uso adecuado de los antibióticos. En este contexto, Sernapesca solicitó a Favet desarrollar un Manual de Buenas Prácticas en el uso de antimicrobianos y antiparasitarios en la salmonicultura chilena.
“En este Manual se abordan diferentes temas farmacológicos relacionados con los antibióticos y antiparasitarios que permiten al Médico Veterinario seleccionar adecuadamente una terapia, con el fin de lograr un éxito terapéutico y contener la resistencia de las bacterias y parásitos frente al arsenal terapéutico disponible en la actualidad”, puntualizó la Dra. San Martín, explicando que estas reglamentaciones, tanto nacionales como internacionales, no solo están orientadas a contener la resistencia bacteriana, sino que además permiten prevenir o reducir el impacto negativo de estos medicamentos en el medio ambiente y asegurar la entrega de un alimento inocuo y de alto valor proteico al consumidor.
La elaboración y puesta en marcha de una Prescripción Médico Veterinaria “on line” para el uso de antibióticos en salmones es otro de los principales logros y avances en RAM. “Actualmente, la adquisición de antibióticos solo se puede realizar con estas prescripciones y el uso solo se puede hacer bajo la supervisión veterinaria. La utilización obligatoria de estas prescripciones permite además conocer y transparentar la cantidad y uso de estos medicamentos en la industria del salmón”, detalló la profesora San Martín, relevando, además, que los resultados de las investigaciones de Favet han permitido disminuir alrededor de un 40% el uso de antibióticos en esta industria, de acuerdo con los registros de Sernapesca.
En la producción animal, el rol del Médico Veterinario resulta vital para la implementación de medidas para la prevención de enfermedades infecciosas y el uso adecuado de los antibióticos para asegurar la salud pública y la protección del medio ambiente. Las y los profesionales deben velar por la bioseguridad, buenas prácticas de higiene y de producción para proteger el bienestar animal, humano y medioambiental, garantizando la inocuidad de los alimentos y reduciendo el impacto negativo de estos medicamentos.