Desde el año 2001 Chile es exportador de productos bovinos, luego de que las autoridades pertinentes así lo decidieran argumentando las ventajas sanitarias del país en comparación con nuestros vecinos. Este privilegiado escenario ha permitido a la carne chilena, durante los últimos años, abrirse paso en mercados de relevancia como México, Estados Unidos, Canadá, Japón y las naciones de la Unión Europea.

Debido a la condición actual que ostenta Chile como exportador, es fundamental demostrarle al mundo que nuestras carnes y productos pecuarios están libres de enfermedades, tales como, la Encefalopatía Espongiforme Bovina -conocida popularmente como Mal de las Vacas Locas- y que la probabilidad de que exista el prión, o agente infeccioso que la transmite, es cercana a cero. Así lo explicó esta mañana el Dr. Hernán Rojas, Jefe de la División de Protección Pecuaria del Servicio Agrícola y Ganadero (SAG), durante la inauguración del Curso “Patologías y diagnóstico diferencial de enfermedades producidas por priones en bovinos y ovinos”.

Producto de la excesiva preocupación que existe en el mundo con respecto a la propagación de esta enfermedad, el especialista señaló que es imperioso para nuestro país “estar generando masa crítica que esté en la frontera del conocimiento en este tema, que conozca sus métodos de diagnóstico y lo que está ocurriendo en el mundo”. Por tal motivo valoró la realización de actividades académicas al respecto.

Participaron en esta actividad, desarrollada en la Sala Ignacio Domeyko de la Casa Central, el Prof. Santiago Urcelay, Decano de la Facultad de Ciencias Veterinarias y Pecuarias, especialistas del SAG, académicos, médicos veterinarios, egresados y estudiantes.

Este encuentro, patrocinado por la Facultad de Ciencias Veterinarias y el SAG, continúa mañana desde las 8:30 horas con una actividad práctica que será dirigida por destacados especialistas, entre ellos, el Prof. Gustavo Farías, de la Unidad de Fisiopatología del Departamento de Patología Animal.