Favet, siguiendo la misión de la Universidad de Chile de aportar al desarrollo del país, participa activamente en proyectos de investigación para potenciar la acuicultura a nivel mundial en diferentes áreas, tales como farmacología, genética, epidemiología, inocuidad de los alimentos, desarrollo de vacunas, nutrición, entre otras; a través de un trabajo interdisciplinario con otras unidades académicas y de otras instituciones de educación superior nacionales e internacionales.
“Un ejemplo de la contribución de Favet al desarrollo de la acuicultura nacional es nuestra participación en el Center for Research and Innovation in Aquaculture (CRIA), un centro de nuestra Universidad que apunta a generar conocimiento aplicado para potenciar la acuicultura a nivel local y regional”, destacó el Dr. José Manuel Yáñez, académico del Departamento de Medicina Preventiva Animal de Favet.
El CRIA es un centro que cuenta con una unidad experimental en Campus Sur, en el que participa Favet, la Facultad de Ciencias Agronómicas y el Instituto de Nutrición y Tecnología de los Alimentos (INTA) y que congrega a académicos, investigadores y estudiantes de pre y postgrado para desarrollar conocimientos, potenciar la investigación acuícola y desarrollar servicios que puedan generar un impacto positivo en la industria, buscando alianzas con empresas, gremios u organizaciones para abordar nuevos desafíos.
“El objetivo de gran parte de las iniciativas de investigación que Favet lleva a cabo tienden a generar mayor conocimiento para incrementar la eficiencia y sustentabilidad de la producción acuícola. En este sentido, es clave el compromiso con mejores prácticas de cultivo y aprovechamiento de los recursos disponibles, tales como, reducción del uso de antibióticos, mayor eficiencia en la producción y mejoras en el bienestar animal”, explicó el Dr. Yáñez, enfatizando que todas las acciones apuntan a generar un menor impacto ambiental y a un mayor compromiso con la salud pública.
El Dr. Yañez ha estado trabajando en investigaciones en el ámbito del mejoramiento genético para el desarrollo de la acuicultura, que en el caso de nuestro país es híbrida por ser continental y marina.
“El mejoramiento genético es importante en cualquier actividad relacionada con la producción animal. En la acuicultura permite la estimación del mérito genético ´de los reproductores para distintos caracteres de interés económico, como crecimiento, resistencia a enfermedades, entre otros, con el objetivo de generar cambios continuos y permanentes en las próximas generaciones”, señaló el Dr. Yáñez.
De acuerdo con el Dr. Yáñez, quien participó este año en un seminario internacional on line sobre acuicultura, al momento de implementar un programa genético se requiere, además de los recursos económicos, asegurar que se pueda sostener en el tiempo; como ha sido el caso de mejoramiento genético de salmones, truchas y tilapias.
“El mejoramiento genético permite mejorar la eficiencia de los resultados productivos y la resistencia a enfermedades. En animales acuáticos se avanza hasta 20 veces más rápido que en la producción de animales terrestres con programas de mejoramiento genético”, afirmó el Dr. Yáñez en su exposición en la I Conferencia Internacional Online Acuicultura Continental CIOAC 2020, organizada por el Centro de Innovación Productiva y Transferencia Tecnológica Acuícola Ahuashiyacu de Perú.
El Dr. Yáñez tiene a cargo una de las iniciativas más importantes para este año en el área, la organización de la XIV versión del Simposio Internacional de Genética en Acuicultura. La Universidad de Chile será anfitriona de este encuentro que reunirá expertos internacionales en la sureña ciudad de Puerto Varas para intercambiar los conocimientos más actualizados en genómica para mejorar la eficiencia y sustentabilidad de la acuicultura.
Diversificación acuícola y CRISPR
De acuerdo con la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), la tendencia de la alimentación saludable está aumentando el consumo de productos del mar. En este sentido, Chile está buscando nuevas especies acuícolas para diversificar su oferta de modo sustentable a través de diferentes programas que buscan adquirir conocimiento científico y desarrollo tecnológico sobre estos nuevos productos y procesos, que además de contribuir a la producción de alimentos, permitan la creación de negocios e inversiones asociadas al sector.
El Dr. Víctor Martínez, académico del Departamento de Fomento de la Producción Animal, forma parte del comité técnico de la diversificación acuícola de Seriola Lalandi, más conocido como Dorado o Palometa, pez que se encuentra en diferentes lugares del mundo, pero en nuestro país es endémico de la zona norte porque prefiere aguas cálidas.
“Son nuevas especies, no hay mucha información a nivel mundial y esto es esencial para diseñar programas de mejoramiento genético para esta especie, como parte del programa de la diversificación acuícola nacional”, comentó el Dr. Martínez.
El Seriola Lalandi sería una especie relativamente fácil de cultivar por su biología. De acuerdo con el Dr. Martínez, su forma de reproducción, con desoves múltiples a través de todo el año, hace que su cultivo sea promisorio como una actividad empresarial. En muchos países se ha adoptado como un eje principal de desarrollo acuicultor. Sin embargo, se presentan desafíos para los productores ya que el sexo de un individuo no se puede determinar mediante el dimorfismo sexual, y por ello, el grupo Favet Inbiogen en conjunto con investigadores nacionales ha desarrollado una herramienta que permite su determinación a través de un examen PCR. Todo ello, considerando que se debe tener como base la claridad en el genoma de una población de esta especie en cautiverio, pues la consanguineidad puede acarrear problemas en la calidad de los nuevos individuos.
“Estamos a la vanguardia, entregando información científica y aplicada a otros países del Pacífico Sur como Australia y Nueva Zelanda porque tienen poblaciones similares de Seriola en sus costas”, relevó el Dr. Martínez sobre los avances biotecnológicos en el programa de diversificación de Chile, considerando el desarrollo del genoma de esta especie nacional. “Estamos liderando en el desarrollo del genoma de este especie a nivel mundial”, enfatizó.
En toda producción animal, lo más importante es el bienestar de la especie, cómo su producción impacta el medio ambiente y cómo esa producción se ve amenazada por enfermedades.
“En el caso de Seriola hay enfermedades parasitarias y hay otros problemas asociados a metabolismo y a parásitos”, explicó el Dr. Martínez destacando la preocupación por el bienestar de esta especie en este programa de diversificación de la producción acuícola para dejar de tener solo una especie para comercializar, el salmón.
En el laboratorio de Favet Inbiogen, Unidad de Investigaciones en Biogenética Animal, el Dr. Martínez está trabajando en dos proyectos en colaboración con la Universidad de Washington. El determinar los factores genéticos asociados a la domesticación de los stocks, analizando cuáles son las particularidades de los genomas de especies que hacen posible que se puedan reproducir en procesos de producción intensivas. Este proyecto Fondecyt determinará la huella de domesticación en estas especies.
El segundo proyecto, en colaboración con Noruega, es para modificar el genoma mediante CRISPR para modificar ciertos genes de manera experimental, de forma tal de poder determinar la causalidad de distintos genes que, de acuerdo con el Dr. Martínez “hemos visto están asociados a la resistencia genética de parásitos y bacterias” en las poblaciones de salmón.
Además, se están definiendo estrategias que permitan preservar el patrimonio genético de la Seriola desarrollado en Chile y de nuestras pesquerías de esta especie en Chile.
Por estas investigaciones, el Dr. Martínez ha sido invitado a participar en diversas instancias a nivel internacional tales como PAG en Estados Unidos, ICISB en Escocia y en India, donde mantiene una colaboración para el desarrollo de la genómica de Carpas mayores.
De acuerdo con nuestros expertos Favet, los principales desafíos actuales de la acuicultura apuntan a generar mejores medidas de control de enfermedades y diversificar la producción de especies acuícolas del país, promoviendo prácticas sustentables en pos de la salud animal, humana y medioambiental y la conservación de la biodiversidad.